Ingredientes para la masa perfecta

Una buena pizza empieza por una excelente masa. En esta receta, te compartimos cómo lograr una masa suave, esponjosa y con el grosor justo para acompañar la potencia de los quesos.

• 500 g de harina 000
• 10 g de sal
• 7 g de levadura seca
• 300 ml de agua tibia
• 2 cucharadas de aceite de oliva

Preparación de la masa

1. Activá la levadura: mezclá la levadura seca con un poco de agua tibia y una pizca de azúcar. Dejala reposar unos 10 minutos, hasta que burbujee.
2. Armá la masa: en un bol grande, colocá la harina y la sal. Hacé un hueco en el centro y agregá la levadura activada junto con el agua y el aceite de oliva. Integrá todo hasta formar una masa.
3. Amasá con ganas: en una superficie enharinada, trabajá la masa durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Si se pega, podés agregar un poco más de harina.
4. Dejala descansar: formá una bola, ponela en un bol aceitado, cubrila con un paño húmedo y dejala reposar en un lugar cálido por 1-2 horas, hasta que duplique su tamaño.
5. Estirado final: una vez leudada, dividí la masa en dos porciones para hacer dos pizzas medianas y estiralas sobre una superficie enharinada.

Ingredientes para una pizza llena de carácter

La combinación de quesos y cebolla caramelizada le da a esta pizza un toque sofisticado. Cada ingrediente juega un papel importante para lograr el balance perfecto de sabores.

• 200 g de mozzarella rallada
• 100 g de queso azul desmenuzado
• 100 g de ricota fresca
• 1 cebolla roja en rodajas finas
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta a gusto

Armado y cocción

1. Precalentá el horno: antes de armar la pizza, asegurate de que el horno esté bien caliente a 220°C. Así garantizás una cocción pareja y un dorado espectacular.
2. Cubierta de quesos: empezá distribuyendo la mozzarella rallada por toda la masa, asegurate de cubrir bien los bordes. Agregá el queso azul desmenuzado y la ricota en pequeñas cucharadas para repartir los sabores de manera uniforme.
3. Toque de cebolla: disponé las rodajas de cebolla roja sobre los quesos. Durante la cocción, la cebolla se va a caramelizar, aportando un toque dulce que equilibra la intensidad del queso azul.
4. Horneá a la perfección: poné la pizza en el horno precalentado y cocinala durante 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén dorados y los quesos fundidos de manera irresistible.

Un clásico renovado para los fanáticos del queso

Esta receta de pizza no solo celebra la tradición italiana, sino que la lleva un paso más allá con ingredientes gourmet que aportan texturas y sabores únicos. El queso azul, con su sabor intenso, se combina de manera equilibrada con la suavidad de la ricota y el dulzor de la cebolla caramelizada. El resultado es una pizza que podés disfrutar en una noche con amigos, una cena especial o simplemente para darte un gusto.

En Argentina, donde la pizza es casi una religión, esta versión gourmet es un homenaje a los paladares que buscan algo más allá de lo común. ¡Animate a probarla y deleitá tus sentidos!